Prepara el pastel según las instrucciones del empaque y coloca en un molde rectangular para pastel previamente encerado.
Hornéalo a 350º por 35 minutos.
Deja que repose 10 minutos, desmolda y déjalo que se enfríe por completo.
Cuando esté frío, córtalo a la mitad hacia lo largo y coloca la parte de abajo en un molde del mismo tamaño.
Cubre con el helado de vainilla y coloca la otra capa encima.
Refrigera por 2 horas y corta en pedazos iguales.